Jean Overton Fuller - El siguiente artículo fue publicado en la revista Astrología, órgano oficial de CABA, nº 77, correspondiente al segundo trimestre de 1979.

Las Revoluciones Solares anuales y Lunares mensuales son herramientas astrológicas familiares, pero además existen otras revoluciones: la de los planetas. Si las revoluciones de las Luminarias al lugar que ocupaban en el nacimiento tienen significación, la revolución de los planetas también debe tenerla.
El ciclo de Saturno es algo menos de 30 años y el de Júpiter, algo menos de 12 años. Saturno tiene tan poco movimiento dentro de las 24 horas que no es posible calcular las cúspides de la carta para el momento exacto en que éste hace su revolución al lugar que tenía en el nacimiento, aunque se pueden superponer las posiciones del resto de los planetas a la carta natal en el día en que se produce la misma y así poder estudiar los aspectos que se conforman.
Comencemos con Saturno, porque Neptuno y Plutón tienen órbitas tan enormes que ningún ser humano alcanza a vivir suficientes años como para ver el ciclo completo, y sólo unos pocos pueden vivir una revolución de Urano en el 84 cumpleaños, cuando este planeta llega al lugar que tenía en la carta de nacimiento. Para Júpiter y los planetas interiores, es posible levantar una carta para el momento exacto de la revolución planetaria. Las revoluciones de Júpiter, Marte, Venus y Mercurio, son cálculos valiosos para estudiar los temas que ellos rigen.
Nunca intenté evaluar la posición de un hombre o de una mujer, respecto al matrimonio o cuestiones de amor, sin calcular previamente la revolución en curso de Venus para el hombre y de Marte para la mujer. También considero las Revoluciones de Marte para el hombre y de Venus para la mujer, en cuanto realización de las características propias más que al ingreso en sus vidas de personas del sexo opuesto.
Estas Revoluciones de Venus y Marte, que son un poco más breves que un año y dos años solares, respectivamente, las encuentro reveladoras en cuanto a los asuntos en cuestión durante el período considerado. Hacia el final del período, al igual que en el caso de una Revolución Solar, le doy más importancia a la que está por llegar que a la que está por expirar.
Pero estas sencillas revoluciones aunque son significativas, no son toda la historia. Hay algo más que observé y es que en cada planeta existe un período de años, después del cual, la revolución de retorno del planeta coincide con la Revolución Solar.
La Revolución de Venus tiene lugar cada 8 años, volviendo a su lugar natal el día del cumpleaños, o a lo sumo uno o dos días antes. La denomino Revolución Mayor de Venus. Si Venus está angular en la carta de su Revolución Mayor, el efecto, en el caso de un hombre, será extremadamente poderoso e influirá sobre todo el próximo período de 8 años, dentro del cual, sin embargo, las 7 revoluciones menores tendrán sus efectos.
Mi asombro fue mayor cuando descubría que había una Revolución Mayor Lunar y que no era más corta que la de Venus, como era de esperar. La Revolución Mayor de la Luna es de 30 años. Pare el cumpleaños de los 30, los 60 y, si se vive, los 90, la Luna transitará el lugar que tenía en el radical o estará muy cerca de ella. Al principio, cuando encontré que la Revolución Mayor nunca está más de un día antes o después del cumpleaños en cuestión, supuse que ésta sería la regla, pero un control de 200 años de efemérides, reveló que puede caer dentro de los 3 días del nacimiento. Obsérvese que esta Revolución Lunar puede ser calculada como una revolución Lunar ordinaria, con la deferencia que su efecto no dura un mes, sino 30 años. Sostengo que la Revolución Lunar Mayor (al igual que las comunes) son de suma importancia en el caso del hombre. Si la propia Luna o Venus está angular en la Revolución Lunar Mayor, es probable que el efecto influya en las relaciones con las mujeres por los próximos 30 años. Existe sólo un intervalo de 2 años entre la Revolución Lunar Mayor (30 años) y la Revolución de Venus Mayor (32 años). Si los testimonios de estas dos figuras se apoyan entre s& iacute;, el efecto será acumulativo.
Las mujeres, en general, está más complicadas, porque Marte, aunque generalmente se encuentra cada 15 cumpleaños en el signo ocupado en el radical, no es tan buen reloj como Venus o Luna. Es un reloj que tiende a atrasar. El retraso se va acumulando, y a mediados de la existencia, puede hallarse que la Revolución Mayor de Marte cae alrededor de 3 semanas del cumpleaños.
La Revolución Mayor del Sol se da cada 33 años, y para la mujer tiene un significado especial. Este ciclo es tan exacto que cada 33 cumpleaños los ángulos de la Revolución Solar casi coinciden con los de la carta natal. La coincidencia puede ser exacta o tener el MC 2 o 3 grados de diferencia.. Si asciende un grado de ascensión corta puede haber una diferencia de más grados en el Ascendente. Este mapa tiene validez durante 33 años, pero como el ciclo es muy largo, recomiendo usar junto con ella la Media Revolución Solar Mayor, o sea, el punto medio que cae a los 16 1/2 y 48 1/2 años, con el objeto de hacerla más útil para la mujer durante los años en que es más probable que forme pareja con un hombre. Como 33 no es divisible por 2, estas Mediar Revoluciones Solare Mayores no caen sobre el cumpleaños, sino 6 meses más tarde, cuando el Sol está en oposición a su lugar radical. He conocido las posiciones planetarias de esta Media Revolución Solar Mayor de una persona que se conectaron de un modo notable con las del horóscopo del cónyuge en la época en que se estableció una profunda relación.
La Revolución Lunar Mayor puede ser dividida, por supuesto, de la misma manera. Treinta es un número par, así que se encontrará que ellas caen sobre o cerca de los cumpleaños 15 y 45, cuando la Luna se encuentra en oposición a su lugar radical. No quiero decir que hay que limitarse a las de la Luna para el hombre y a las solares para la mujer. Treinta y tres, el período de la Revolución Solar Mayor se dice que es la edad de la madurez y perfección. Además las progresiones Terciarias, basadas en el ciclo de la Luna de 28 días, hallé que son de mucha fuerza, sean calculadas a partir de la Epoca Prenatal o a partir de la Natividad. Pero 28 días es el ciclo normal del período menstrual de la mujer, lo cual aclara mi punto de vista de que la Luna (sus ciclos y todas las mediciones basadas en ella) representa en el horóscopo de una mujer a ella misma en tanto tenga que ver con sus ritmos biológicos y toda aquella parte de su vida que tenga que ver con ellos.
El Sol es su propio espíritu, ciertamente, pero también es el espíritu que ella espera encontrar en un hombre. Con todas estas figuras de revolución, relacione aquellas pertenecientes a una pareja tal como usted lo haría con las figuras radicales o progresadas.
Nada he dicho hasta ahora sobre Mercurio. El estudio de sus ciclos está lleno de sorpresas. Durante mucho tiempo, no fui capaz de hallar el ciclo mayor de Mercurio y casi llegué a creer que no tenía ninguno. Su órbita está dentro de la de Venus, cuyo ciclo mayor es de 8 años y pensé que debía caer dentro o cerca de éste, pero en realidad, no es así. Descubrí, por fin, que la Revolución Mayor de Mercurio es a los 125 años. ...El ciclo, una vez hallado, parece ser regular y seguro; sólo que es muy largo para nuestro uso personal, aún tomando la mitad. Si se divide el ciclo en cuartos, el planeta estará en cuadratura a su posición radical cuando se tiene 31 años y 3 meses de edad. Puede haber unos días de disparidad, pero conviene tomar el día en que Mercurio llega 90º más delante de su posició n radical como de especial significado para todo aquello que está bajo la regencia del planeta.
En mi propio caso, una cuarta parte de la Revolución Mayor de Mercurio correspondió a la publicación de mi primer libro. He escrito desde la niñez y Mercurio natal está bien aspectado con un trígono de Saturno (Saturno en Géminis en la casa VIII, Mercurio en Acuario en la III), pero hasta que no se produjo el cuarto de Revolución Mayor, no publiqué. Se vendieron 140.000 ejemplares, inaugurando una época de éxito en mis escritos que luego continuó. En el momento exacto del Cuarto Mayor, el libro se hallaba en la imprenta.
Cuando descubrí esto, se me ocurrió averiguar si otros escritores que habían comenzado tardíamente, lo habían hecho a los 31 años. El primer nombre que recordé fue el de Edward Thomas, el poeta inglés que actualmente es considerado el m& aacute;s importante entre los de Georgia. Un rápido control en la enciclopedia reveló que nació en marzo de 1878. En 1907, tuvo una entrevista con el poeta americano Robert Frost, quien le sugirió por primera vez que debía tratar de escribir poesía y su primer libro de poemas apareció en 1910. La Revolución de la cuarta parte del ciclo de Mercurio se produjo en 1909. No puedo pensar que esta coincidencia carezca de significado.
Júpiter tiene una Revolución Mayor de 83 años, correspondiendo a 7 revoluciones simples, y parece ser muy regular. La mitad de este período es de 41 1/2 años, o sea muy cerca de la mitad del ciclo de Urano de 42 años, al que siempre tomé como un punto a mitad del ciclo de la vida, muy útil como para realizar una investigación.
La Revolución Mayor de Saturno fue difícil de encontrar, pero resultó ser de 147 años. Es menos regular que el ciclo de Júpiter (así como Marte es menos regular que Venus) tendiendo a alejarse unos pocos grados. No sé si considerarlo como coincidencia pero los planetas benéficos resultan ser los mejores relojes.
Finalmente, todas las revoluciones a las que me he referido, pueden ser calculadas con facilidad partiendo de la Epoca prenatal o de la propia Natividad. A estos mapas los hallé particularmente esclarecedores respecto a los profundos acontecimientos de la vida. Parecen tener relación entre sí, similar a los de la Epoca y Natividad radical pero con respecto a la concepción y a la manifestación de las completas facultades del adulto.